Seligra, la firma de sastrería a medida, abre las puertas de su nueva boutique en el corazón de Valencia. Después de aproximadamente cincuenta años en la misma ubicación, la marca se muda al número 15 de la calle Juan Cortés y da este importante giro con Adrián Seligra, nieto de Víctor Seligra y tercera generación al frente de la empresa. Sastre y cabeza visible del negocio, Adrián ahora da comienzo a una nueva era de carácter continuista: «Somos los de siempre, pero adaptándonos a los nuevos tiempos».
Seligra nació en 1965 de la mano de Víctor Seligra. Hijo y nieto de sastre, dedicó su vida a esta profesión y se aventuró con la apertura de la primera boutique que más adelante se convertiría en un legado familiar. Tres generaciones después, Adrián Seligra se hizo cargo de la empresa y lleva ya al frente de la misma ocho años: «Ya mi bisabuelo y tatarabuelo eran sastres, el apellido Seligra lleva muchos años ligado a la sociedad valenciana».
Durante la inauguración, en la que el catering estuvo a cargo de @cocinopati, se presentaron los tres espacios en los que se divide la tienda, cada uno creado y diseñado para que el cliente se sienta como en su casa. Esta nueva boutique está totalmente enfocada al consumidor, ya que busca mejorar su experiencia y darle un trato más personalizado. Además, combina lo mejor de las generaciones previas con la nueva, de modo que se mantienen elementos de la tienda anterior, como el mueble de madera en el primer espacio, dedicado a Víctor Seligra fundador de la marca, y se añaden otros acordes a Adrián que transmiten el relevo generacional.
Se trata de espacios sofisticados, con un diseño atemporal y un toque diferenciador, que tienen influencia clásica italiana, española y británica. La decoración es rica en detalles y elegante en color. Además, en esta nueva boutique conviven el arte con mobiliarios, objetos de culto, papeles tapiz, grandes espejos de autor y terciopelo de algodón.
Esta nueva tienda tiene 160 metros cuadrados frente a los 75 de la anterior. Una boutique amplia, especial y renovada, que aunque tiene distinto número permanece en la misma calle. Seligra mantiene su esencia, esa que en su día le hizo crecer y ser de los mejores en su sector, pero evoluciona, se adapta y sigue el ritmo a las nuevas generaciones. La familia Seligra crece, y la marca crece con ella.
Seligra destaca por sus diseños completamente únicos y especiales, adaptados para cada persona y situación. Se trata de prendas hechas a medida y con mucho mimo, que no dejan a nadie indiferente. La opción perfecta a la que recurrir si eres de esas personas a las que les gusta innovar, destacar y no ser uno más en la multitud.
