La pieza de autor y Studio Montañana

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La sensibilidad de la propia pieza de autor conforta y conforma la belleza del entorno, su ausencia de elementos secundarios, que en el espacio pueden entorpecer la pureza de la arquitectura y sus materiales empleados, son resaltados y apoyados por este diseño que, junto a su materia, convierten los espacios en clásicos contemporáneos. Su propio lenguaje es absoluto e independiente, sin necesidad de ser acompañados de complemento y ornamento.

El mueble de autor viste y fortalece la arquitectura con significados culturales y con guiños a la historia del diseño. Con su elegancia innata transforman de magia un entorno.

El proyecto de un espacio se compone de cada uno de los elementos que por sí mismos tienen un valor único, donde cada uno de ellos es, a su vez con el resto de la arquitectura y forma, un punto de encuentro que nos permite vivir y disfrutar. «El diseño de autor que nace desde la creación formal y la sensibilidad por la nobleza de la materia nos lleva a un viaje hacia la belleza de un espacio», afirman desde Studio Montañana.

El diseño de una pieza está cargado de valores sentimentales, emocionales, económicos, que aportan estos mismos reconocimientos al lugar donde son habitados. La belleza y culto a las piezas de autor nos lleva a un espacio enriquecido, donde el lenguaje que se proyecta es muy personal, de respeto a través de la memoria del tiempo, pues las piezas de autor perduran en los años sin quedar obsoletas y sin crear necesidad de ser reemplazadas por las tendencias estéticas o formales de cada momento. Su estética crece sin perder identidad, convirtiéndose en un clásico del diseño moderno.

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Vicente Montañana y Francisca Casans

Diseño del mueble de autor

«El diseño de un mueble debe buscar el equilibrio entre la escultura y la ingeniería, entre lo artesano y los procesos industriales». Si este diseño, por su forma y función, además se dota de alma y concepto por su propio creador y, a su vez, estas formas y funciones se adaptan bien en el tiempo, perdurando sobre todas las tendencias del momento, este objeto–mueble se convierte en Mueble de Autor.

Se convierte y se identifica como diseño de autor cuando este mismo está cargado de historia e identidad propia. Cuando es creado por personas relevantes en el diseño y su identidad corresponde a una época y estilo, o bien a un determinado proyecto, para el cual fue concebido. En ocasiones, muchos muebles considerados de autor fueron diseñados por su creador para formar parte de un diseño arquitectónico, sean viviendas o espacios públicos.

Pues si bien el diseño es la disciplina clave para la innovación, este mismo permite materializar los productos en el espacio. El diseño es el método que ayuda a resolver los problemas del ser humano frente a las formas, la ergonomía y organización de espacios, donde nos movemos a diario.

Originalidad del mueble de autor

El mueble de autor parte de un original. Una pieza original se caracteriza por su propia certificación y su autenticidad se mantiene en el tiempo, como el propio mueble. Estos originales, de gran valor por ser piezas que ya no se producen, tienen mucho carácter y se dotan tanto de gran valor económico como sentimental. Son escasos los originales de la época, pero sí existen editoriales que siguen produciendo estas mismas piezas, bajo un rigor absoluto a su pieza original, respetando en el tiempo tanto materiales, formas y dimensiones, avalando siempre su certificado de autenticidad. Las reediciones son totalmente respetuosas y fieles al diseño y, les ocurre lo mismo que a los originales, frente al tiempo cobran valor sentimental y económico.

Texto de Vicente Montañana

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