Hace ya muchos años que estamos familiarizados con el concepto de moda ibicenca, y es que ha recobrado una importante fuerza en el mundo de la moda y las tendencias. Además, es un importante impulsor de la economía local y del turismo pero, a lo largo de los años, la moda ibicenca ha ido calando en nuestra cabeza únicamente en un término: prendas de color blanco.
El concepto se ha ido tergiversando con los años, y aunque no hace falta contratar un alquiler en Ibiza de coches baratos y recorrer toda la isla para descubrir todo sobre la moda ibicenca, hay veces que merece la pena recordarlo. La moda ibicenca comenzó a pegar fuerte a principios de la década de los setenta y estaba influenciada por el movimiento hippy cuyo objetivo era vestir como más cómodo, libre y a tu gusto te sintieras pero sin perder el estilo.
En el origen de este movimiento todo era muy colorido y llamativo, el blanco ni tan sólo pasaba por la cabeza de los auténticos propulsores de esta moda. La moda ibicenca no es el blanco, la moda ibicenca debe ser sinónimo de libertad y comodidad, unidas ambas al estilo único de uno mismo. Esta moda es conocida como moda Adlib, y se distingue por ensalzar las prendas artesanas y utilizar tejidos naturales y nada pesados. También son muy característicos de esta moda los encajes, bordados y volantes que ensalzan los movimientos naturales de nuestro cuerpo. La clave está en dejar atrás la incomodidad y rigidez de las prendas que llevamos diariamente, como los vaqueros por ejemplo. También se trata de dejar atrás las prendas apretadas que no dejan respirar al cuerpo. Si utilizamos prendas de algodón sueltas y agradables al tacto podremos conseguir la libertad y belleza que de verdad caracteriza a la moda ibicenca.
Para finalizar, consideramos que una de las mejores cosas que tiene la moda ibicenca es que prácticamente la puedes utilizar para cualquier ocasión, por ejemplo, puedes ponerte un vestido de algodón fresquito con el bikini debajo y unas sandalias planas para ir a la playa pero si por la noche lo combinas con unas plataformas llamativas y un collar brillante a juego con un brazalete puede ser un look perfecto para asistir a una cena veraniega con amigos.