Casas inHAUS se consolida como la empresa de construcción modular de viviendas de gama alta en España tras alcanzar los 56 millones en ventas desde 2019. A falta del último cuatrimestre de 2021, la cifra de ventas ya duplica el total del 2019, año de referencia anterior a la pandemia. De este modo, inHAUS sale reforzada como la marca líder a nivel nacional de casas modulares premium, fabricadas en una nave industrial en menos de 5 meses.
El ticket medio de venta se sitúa actualmente en 780.000 euros, lo que supone el doble que hace dos años. El incremento en la venta cruzada ha fortalecido el aumento de la facturación de Casas inHAUS, que aporta un servicio integral a sus clientes desde su sede en Almussafes (Valencia). De esta manera, ofrece tanto la casa acabada con precio cerrado llave en mano como otros servicios complementarios: los proyectos de jardín y paisajismo exterior y las opciones de piscinas prefabricadas y vallados exteriores. La posibilidad de incluir el mobiliario y todo el estudio de interiorismo logra captar el interés de los clientes que buscan un ‘todo incluido’.
Todo ello, al añadir a la casa el proyecto de urbanismo y el de interiorismo, ha permitido el notable incremento del ticket o precio medio de venta, como respuesta a la demanda de los clientes de un producto con todo incluido, de principio a fin.
En concreto, el 34 % de las casas terminados han incluido proyecto de interiorismo. El 90 % de los proyectos terminados por inHAUS contemplan la ejecución del proyecto de urbanismo: con jardín, piscina y vallado exterior. Esto permite ofrecer un diseño perfectamente integrado de todo el conjunto de la vivienda.
Por otra parte, un 20 % de las casas prefabricadas de inHAUS proceden de promotores profesionales de lujo. Además, un 27 % de las casas, incluidos los proyectos particulares, ya tienen como origen un diseño iniciado por otro arquitecto. El sistema de construcción propio desarrollado por Casas inHAUS permite una gran versatilidad y se adapta con facilidad a diseños de terceros. Esto permite que cada vez más arquitectos encuentren en Casas inHAUS la mejor solución para llevar a cabo sus diseños.
Perfiles de clientes y casas de alta calidad
Los compradores de casas de la marca inHAUS son tanto de origen nacional (57 %) como extranjero (43 %). Entre los clientes españoles inHAUS se incluyen numerosos profesionales que han estudiado o residido en otros países. Este perfil internacional ha ido potenciándose e incrementándose desde 2017. El 64 % de la facturación entre 2020 y 2021 fue con clientes con estas características: extranjeros o españoles con perfil internacional. En 2022 la previsión es triplicar la cifra facturación en el extranjero, con la ejecución de diversos proyectos actualmente en estudio en Francia, Suiza, Alemania y Estados Unidos.
El fortalecimiento de Casas inHAUS en apenas seis años ha permitido llegar a la vivienda número 100, que será implantada en su parcela dentro de dos semanas. Además, la firma valenciana acumula un total de 140 proyectos, buena parte de los cuales serán ejecutados en el próximo ejercicio.
La planta de Casas inHAUS obtendrá su récord de producción en 2022, ya que está comprometida la construcción de hasta 12.500 metros de cuadrados de viviendas de gama alta. La previsión para 2023 se sitúa ya en 16.000 metros cuadrados. Con este crecimiento, la firma estudia aumentar su capacidad de fabricación a corto plazo.
En el perfil del cliente de inHAUS destacan características como la búsqueda de un producto con acabados de máxima calidad, rapidez en la entrega, fiabilidad en cuanto a plazos (garantizado en 5 meses) y precio cerrado desde el principio. Y, cada vez más, un elevado nivel de conciencia medioambiental.
La sostenibilidad es una de las máximas para Casas inHAUS y lo consigue con la reducción al mínimo de los desplazamientos y transportes de materiales al lugar de la obra (muy altos en la construcción tradicional), además del uso materias primas lo más respetuosas con el medio ambiente. La construcción industrializada de módulos permite un sistema de trabajo mucho más eficiente. Con un único traslado al lugar de la implantación, el total de las emisiones acaba siendo mucho más reducido que en la edificación clásica ‘de ladrillo’.