El cantante británico Sam Smith se consagró en los Grammy como el ganador de la noche al llevarse cuatro premios de los seis a los que estaba nominado. Smith, con tan solo 22 años obtuvo los galardones a Nuevo Mejor Artista, Mejor Álbum de Pop vocal y Mejor Grabación del año por “In the nolenely tour”, además del premio a la Mejor Canción por “Stay with me”.
Beyoncé fue otra de las ganadoras con tres premios por Mejor Interpretación y Canción de R&B por el tema “Drunk in Love” y Mejor Sonido por su disco “Beyoncé”, elevando su número de Grammys a 20.
Beck se llevó una gran sorpresa al subir al escenario para recoger el premio a Mejor Disco del año, ya que entre los nominados se encontraban Smith y Beyoncé.
Pharrell Williams ganó los premios a Mejor Interpretación Pop por su canción “Happy” y al de Mejor Disco de Música Urbana por su álbum “GIRL”.
La ceremonia que se le celebró el pasado domingo por la mañana estuvo marcada por las actuaciones de diferentes músicos, como Lady Gaga y Tony Bennet, Paul McCartney con Rihanna y Kenya West y Adam Levin junto a Gwen Stefani.
También subieron al escenario ACD, que actuó por primera vez en la historia de los Grammy deleitando al público con sus míticas “Highway to Hell” y “Rock or Bust”. Katy Perry que subió al escenario para cantar el tema “By the Grace of God” y la cantante Madonna, con una actuación inspirada en España por su traje de torera y los cuernos que lucieron sus bailarines.
En la gala que se celebró en el Staples Center de Los Ángeles no faltó el glamour. Aparte de los galardones entregados , algunas de las allí presentes destacaron por sus fabulosos vestidos.
Beyoncé, se coronó como una de las reinas. Para la ocasión se enfundó en un vestido negro semitransparente de encaje floral con glitter y escote en V firmado por Proenza Schouler. Éste recordó a su anterior look en los Grammy 2014 cuando escogió un vestido, también de encaje, de Michael Costello. Aún así, la cantante acertó con el negro que también escogió, una vez recibidos los premios, con su LBD de flecos y lentejuelas firmado por Balmain.
La cantante de Barbados, Rihanna, aunque únicamente obtuvo el premio a Mejor Colaboración por su tema junto al rapero Eminem, “The Monster”, fue una de las grandes protagonistas de los Grammy. Su vestido rosa chicle de Alta Costura de Giambattista Valli acaparó todas las miradas; un diseño voluminoso de tul, con escote palabra de honor y detalles plateados.
Madonna aunque no estaba nominada a ningún premio, fue una de las estrellas gracias a su actuación y su vestido de torera firmado por Givenchy. La montera de lentejuelas con velo de redecilla, las hombreras con pedrería y el corsé de raso y encaje en rosa y negro la hicieron brillar con luz propia por la alfombra roja.
Lady Gaga, antes de cantar “Cheek to Cheek” junto a Tony Bennet, desfiló por la alfombra roja con un vestido de paillettes plateados de inspiración sirena firmado por Brandon Maxwell. Los escotes en V no faltaron en los Grammy, aunque el de Lady Gaga fue uno de los más llamativos. Completó su look con un espectacular collar largo del que colgaba una esmeralda de Lorraine Schwartz.
Taylor Swift estaba nominada a varias categorías aunque se fue con las manos vacías. Su vestido de la colección de primavera de Elie Saab en tonos azul y verde en degradé recordaba a una sirena. La cantante remató su look con unas sandalias moradas de ante y pendientes verde agua.
Katy Perry no ganó ninguno de los premios a los que estaba nominada: Mejor Álbum de una Vocalista Pop y Mejor Actuación Pop en Duo. Sin embargo, su vestido joya de Alta Costura de Zuhair Murad, sus preciosos pendientes de Sophia Webster y su melena morada consiguieron acaparar todos los flashes.
